miércoles, 4 de abril de 2012

Jesús

Jesús decía que toda aquella persona que hiciera bien su camino poseería el reino de los cielos, que era donde habitaba su amado Padre Celestial. Jesús por aquel entonces ya sabía que era un hijo de Dios. La misión que vino a hacer aquí en la Tierra era la de enseñaros a toda la humanidad que vosotros también lo sois.

Él vino a enseñaros a hacer el camino y no le importó pasar el calvario que tuvo que pasar con tal de que vosotros pudierais liberaros del estancamiento en que estabais metidos.

Él vino a traeros la fe y la libertad para poder seguir luchando en vuestro reconocimiento de saber quiénes sois. Su misión fue tan grande que después de más de 2.000 años, todavía se le sigue recordando como cuando estuvo aquí en la Tierra, pues gracias al gran trabajo que hizo, la humanidad pudisteis salir del estancamiento que teníais para seguir vuestra evolución, para poder reconoceros quien realmente sois, hijos de Dios, chispas divinas salidas del corazón del Padre, no me cansaré de repetirlo ya que mi misión consiste en hacéroslo comprender.

Jesús también dijo: “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra” queriendo decir que no tenéis que juzgar a vuestro prójimo, primero porque no sois jueces, y segundo porque la mayoría de las veces las cosas no son como vosotros pensáis y habláis, por eso tenéis que tener mucho cuidado de no hablar sin conocimiento de causa, ya que podéis hacer daño a los demás y también a vosotros mismos, ya que por ley divina todo lo que des, te será devuelto, sea bueno o sea malo.

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