Tentaciones

La persona que tiene la suerte de dominar la obscuridad es afortunada porque eso quiere decir que ha sabido superar las barreras que se ha ido encontrando en su camino y eso le ha enseñado a discernir entre el bien y el mal, sabiendo así en qué lado del camino tiene que estar, y al mismo tiempo, ha hecho una gran evolución espiritual, lo que quiere decir que cada día estará más cerca del Padre porque habrá aprendido a vivir en las leyes divinas y en la justicia del Padre Dios Todo Poderoso, por eso yo os digo hermanos: No os canséis de trabajar en la luz porque ella os llevará al paraíso que tanto deseáis.

La forma que tenga la tentación es un disfraz que se puede transformar en la manera a convenir en el momento adecuado en cada uno de vosotros, por eso tenéis que estar siempre alerta para que no os cojan desprevenidos y saber luchar para no caer en ella.

La ambición es una de las tentaciones más grandes y más socorrida por el mal, porque en ella caéis más fácilmente, por eso os digo, tened mucho cuidado de no ambicionar más de lo que necesitéis pues de lo contrario, vuestra vida se puede convertir en un infierno pensando que os pueden quitar lo que tenéis acumulado. Recordad hermanos que nacéis desnudos y desnudos os tenéis que ir, solo os podéis llevar las buenas obras que halláis hecho aquí en la Tierra.