Antes
de que lleguéis a crearos una tempestad en vuestro interior es necesario poner
remedio a esa situación. La mejor manera de arreglar estas situaciones es
parando por un momento vuestro camino y reflexionar sobre qué es lo que estáis
haciendo mal para que las cosas no salgan como tienen que ser. Vale la pena
intentarlo porque cuando estáis calmados podéis ver con mayor facilidad los
pros y los contras que a lo largo de vuestras vidas os vais encontrando. Si así
lo hacéis os puedo asegurar que vuestra vida puede ser mucho más tranquila y
satisfactoria.
¿Cuántas veces algunos de vosotros por
encontraros en situaciones límite no habéis pensado en quitaros la vida
creyendo que de esta manera se puede solucionar esa situación? A los que así
hayan pensado tienen que saber que ese no es el pensamiento más acertado,
porque si llegáis a realizar ese acto, no solo estaréis atentando contra las
leyes Divinas del Padre, sino que tendréis que reencarnaros otra vez para
seguir en el mismo punto en que lo dejasteis. Esto no es un castigo sino una
nueva oportunidad que el Padre os da para que podáis seguir evolucionando,
aunque a partir de ahora, es muy posible que no haya oportunidades de esta
índole, así que aprovechad la vida que tenéis tratando de evolucionar al máximo
vuestra vida espiritual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario